OUTLANDER. Una película de HOWARD MCKAIN . 2009. “Estreno en Cartelera”

Año 509. Es la era vikinga. Una nave espacial acaba de estrellarse contra un majestuoso fiordo. De la nave siniestrada, desembarcan Kainan, un guerrero humanoide y también el Moorwen una criatura salvaje dispuesta a vengar la muerte de su raza a manos del ejército del guerrero. Aislado en este nuevo planeta, en el que la gente vive a miles de años de la desarrollada civilización que ha dejado atrás, Kainan decide buscar y derrotar a su mortal enemigo. Pero antes de poder llevar a cabo su misión cae preso de los vikingos. Tras salvar de una muerte segura a Rothgar, jefe de los vikingos, Kainan será poco a poco aceptado en el clan y comenzará una estrecha relación con Freya, la hija de Rothgar a la que contará su pasado y la dura pérdida de su familia a manos del Moorwen.

La vengativa bestia asedia el Bastión vikingo y finalmente se presenta en la aldea. Es atrapado por los vikingos, pero consigue escapar hacia el bosque tras herir mortalmente a Rothgar y raptar a Freya. Kainan y los vikingos se enfrentarán a una última desesperada misión: matar al monstruo o ser destruidos.
Es una buena película de aventuras mezclada con la ciencia ficción, con un guión original, pues la película entretiene y se hace pasar un rato pendiente de la trama.

Acertada trasladar la acción en la era vikinga, pues en un aliciente para que la película tenga ese punto de aventuras...lo que no esta nada bien conseguida es la bestia pues los efectos digitales son malos, pues la ponen luminosa y fosforita, parece una feria andante, también los actores parecen niñatos disfrazados, no hay credibilidad, pues en esa época la vida duraba poco y los hombres eran fuertes y duros cosa que en ningún momento aparentan, a excepción del gran Jhon Hurt y el camaleónico Ron Pelmar.
También se agradecería un poco de violencia sangrienta y dureza, pues como ya e dicho en esa época la violencia estaba a la orden del dia. Una simplemente entretenida película...

Lo mejor: es una película de acción y ciencia ficción que en ningún momento pretende ir más allá. Hay varios momentos de tensión y adrenalíticos muy logrados.

Lo peor: la indefinición en la que a veces cae Freya, y sobre todo, el Moorwen, tan rematadamente horrible que no me extraña que no se atrevan a sacarlo con más luz